Termina un curso escolar y sólo puedo decir GRACIAS.Muchas y sinceras gracias
GRACIAS a mis compañeras y compañeros por su ayuda, dedicación y esfuerzo para que el colegio volviera a la vida.
GRACIAS a mi alumnado por su ejemplar comportamiento ante la situación más difícil que les ha tocado vivir en el aula.
GRACIAS a las familias por confiar en mí para educar a sus hijos e hijas en una asignatura que si se siente valorada,es por ellos, quienes importan de verdad.
Y GRACIAS A DIOS por guiarme en este maravilloso, pero duro camino, que comenzamos y que ya hemos terminado.
Vosotros, niños y niñas.alumnado de RELIGIÓN CATÓLICA, hacéis que todo el esfuerzo, sacrificio, sinsabores, fatigas o revés, valga la pena. Sois un orgullo para mí, como vuestra maestra, pero más para la mejor asignatura que existe en la escuela.
¡FELIZ VERANO!
Inés